La vista es el órgano sensorial más importante que tiene el hombre para desenvolverse en la vida cotidiana. Cuando el sentido de la vista no se tiene de nacimiento o bien se pierde por enfermedad o traumatismo, la persona afectada se encuentra con una carencia fundamental en su vida. Esta discapacidad hace muy difícil la movilidad especialmente en el entorno urbano debido a los numerosos obstáculos que el invdente se encuentra en su camino. Si fuéramos conscientes de este problema, el diseño de los espacios públicos se haría con normativas adecuadas. Es cierto que en las ciudades grandes se ha avanzado algo en los últimos años en cuanto al diseño de pavimentos pero no es suficiente. El gran problema está en la anarquía con la que se utilizan los espacios peatonales por parte de los usuarios de motocicletas y en la distribución del mobiliario urbano. También el uso de estos espacios por parte de los negocios de restauración deberían estar sometidos a una ordenanza que obligara a no invadir las zonas de paso y que quedaran debidamente señalizadas para las personas invidentes. Tanto los técnicos como los legisladores deberían ser más sensibles a este problema y procurar hacer la vida menos difícil a los que sufren esta carencia. Cuando se tiene una persona ciega en casa, como es mi caso, se comprende bien lo que estoy diciendo. Para concienciar de ello nada mejor que ver un video muy interesante grabado en Murcia por la TV Regional en donde nos podemos imaginar cómo vive esta discapacidad una persona ciega.

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