No se puede ocultar que el mundo está siendo asediado por criminales que actuan enarbolando la bandera del odio al que les conduce un fanatismo pseudo-religioso. Si no se identifican las causas de este mal, difícilmente se podrán poner en marcha medidas que lo sofoquen. El mundo occidental ha estado ciego durante mucho tiempo pensando que tolerando todas las creencias religiosas, se conseguiría apaciguar a los extremistas. El terror que ha sacudido Europa en los últimos años y cuya última acción ha sido la vivida en París en los últimos días, es una muestra de este fanatismo del que hacen gala algunos musulmanes. Como muestra ofrecemos un video que recoge el odio desatado por los militantes del llamado Califato del ISIS contra los símblos cristianos. No queremos hacer uso de alguno de los muchos videos que se han difundido y que recogen las atrocidades cometidas por estos criminales, pues su visión hiere profundamente a cualquier persona. Confiemos en que la Comunidad Internacinal ponga en marcha un plan conjunto para atajar este fanatismo.
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