El Museo del Louvre de París es una de las más importantes pinacotecas del mundo y es motivo de algunos secretos. El primero de ellos tiene que ver con la famosa pintura conocida como «La Gioconda» la cual ha estado ausente en solo tres ocasiones, desde su llegada al Museo en 1797. La primera vez tuvo como protagonista a Napoleón que ordenó llevarla a sus aposentos. La segunda fue a consecuencia de un robo en 1911 hasta que dos años después fuera recuperada. Posteriormente y con motivo de la segunda Guerra Mundial, salió del Museo para ser preservada junto con otras muchas pinturas. Esta decisión fue adoptada por el Director de los Museos Nacionales quien ordenó su reparto en domicilios particulares para ser escondidas y evitar el saqueo de las tropas nazis. Esta es una historia poco conocida que ha salido a la luz recientemente

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