El café más especial y caro del mundo es el que cagan las civetas. Dicho así parecería un chiste para ubicar en la sección de humor. Pero resulta que en los cafetales de Indonesia se produce una planta de café cuyos frutos son apreciados por la civeta, una especie de comadreja. Pues bien, alguien comprobó que los excrementos de este animalejo contenía los granos de café íntegros y no digeridos. La cuestión es que a partir de este hecho se decidió poner en marcha un proceso de recuperación al constatar que los granos de café habían adquirido unas cualidades especiales. La digestión del fruto ya maduro en el aparato digestivo del luwak, que así se llama la civeta en lengua indonesia, fermenta los granos dándoles un sabor especial. El descubrimiento fué consecuencia de la prohibición que los colonos holandeses hicieron para que los campesinos no recogieran los granos maduros para su uso personal. Estos observaron que las civetas se los comían y dejaban los granos en sus heces por lo que los recuperaban lavándolos y tostándolos para su uso. Algo asi como la casualidad del descubrimiento de la penicilina por Fleming. No parece lógico pensar que alguien haya experimentado intencionadamente con los excrementos de estos animales.
VALORACIÓN=
Hola Antonio, acabo de recibir tu boletín semanal.,, este artículo me hace mucha gracia y me hace recordar una pelicula de Morgan Fredman y Jackson Nicolson en el que uno de ellos, el más adiner ado, lo tomaba y no sabía que era lo que estaba bebiendo…muy simpático!!