Europa es un continente muy variado, tanto por la diversidad de sus habitantes como por los diferentes climas locales. Las costas son muy diferentes si comparamos las del Mediterráneo con las del Mar del Norte. Por otra parte las zonas interiores ofrecen paisajes de montañas y valles como los de los Alpes y otras en paises llanos como los de Holanda. Todo ello condiciona los asentamientos de la población con costumbres que han evolucionado en función del habitat que les circunda. Dando un repaso a los 30 pueblos que se ofrecen en el documento, descubrimos la gran variedad que encontramos a lo largo de la geografía europea y que nos invita a conocerla.

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España y Francia tienen como frontera natural los Montes Pirineos entre el Mar Cantábrico y el Mar Mediterráneo. Esta cadena montañosa contiene los picos más altos de toda la Península siendo el más alto el Pico del Aneto con 3.404 m solo superados en España por el Pico del Teide, en la isla de Tenerife con 3.718 m. Estas montañas, en su vertiente española, conforman unos valles bellísimos en donde se inician los rios que son afluentes del Rio Ebro por su margen izquierda. Son entre otros el Valle de Ordesa, el de Benasque, el de Pineta, el de Añisclo, el de Panticosa, el de Tena, el de Gistaín y muchos más que invitan a ser visitados. En el documento que ofrecemos se puede ver un anticipo de estos paisajes naturales llenos de vida y colorido.

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